jueves, 8 de abril de 2010

En calles como esta


Existen noches apestosas de tu ausencia
En las que tomo decisiones absurdas
Tan absurdas
Como activar un despertador a las 8 de la mañana
Sin haber dormido apenas nada
Meterme en la ducha
Tomar un café y montarme en un avión

Y hago esta cuatro gilipolleces
Para explicarte que mis sabanas se mueven al ritmo de tus recuerdos
Que el alma se me remueve cuando vivo en una ciudad de un millón y medio de habitantes y ninguno eres tú
Que las canciones de amor ya no tiene piedad
Y la gente ya no tiene paciencia
Que las pizzas se hicieron para dos

Y Que tú te hiciste para mí.
que no perdono ni a Dios ni a la tierra
maldita distancia que te aparta de mi
que me odio a mi misma por estar en esta calle y en este país
aquí en frente de ti
que desearía que fueses tú el que estuviese en mi calle y en mi país
en frente de mi y me dijeras
que existen noches que apestan sin mi
que las raíces no tiran sino atan
que la palabra amor te resulta extraña
que en tu vida no hay mas ritmo que el ritmo de mi pelvis
ni mas café que mi despertar
que te arrepientes de lo que hiciste
que el hoy el ayer y el mañana tienen mi nombre
y que el recuerdo no se hizo para mi
ni este olvido se hizo para ti

porque tanto tu como yo en esta casa
en esta calle y en este país
Sabemos que nos olvidamos en el olvido más recordado
que no miramos atrás por no arrepentirnos
y que por estas dos razones tanto tu como yo
estamos en esta calle y en este país
en definitiva supongo o creo que te amo
y que me duele que aunque tu sepas cual es mi calle y mi país
sea yo la hoy haya venido aquí.

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